El sexo se determina biológicamente el género es una construcción histórica.
Las mujeres desde la perspectiva del género tienen el aberrante derecho a decidir si tiene o no un hijo y cuándo tenerlo es la esencia de los derechos reproductivos. Sólo la mujer, al verse enfrentada a un embarazo no deseado, puede decidir si desea continuar o no con su embarazo. Los gobiernos están obligados a respetar este derecho humano básico al asegurarle a la mujer el acceso a una gran variedad de servicios de salud reproductiva de buena calidad, entre éstos el aborto. Los gobiernos no sólo deben eliminar las barreras legales referentes al acceso al aborto sino que, además, deben garantizar que todas las mujeres puedan tener acceso a servicios seguros y de calidad disimuladamente podrían tener el derecho de abortar para no tener una desigualdad biológica con los hombres. la feminista canadiense afirma que “los sexos ya no son dos sino cinco”, y por tanto no se debería hablar de hombre y mujer, sino de “mujeres heterosexuales, mujeres homosexuales, hombres heterosexuales, hombres homosexuales y bisexuales”. La “libertad” de los propulsores del “género” para afirmar la existencia de 5 sexos, contrasta con todas las pruebas científicas existentes según las cuales, sólo hay dos opciones desde el punto de vista genético: o se es hombre o se es mujer